Esta serie de suttas, muestra cómo los seres sintientes migran entre los cinco destinos, yendo, la mayoría de las veces, de los reinos más altos hacia los más bajos, porque no han visto las Cuatro Nobles Verdades.
SN 56,102 Manussacutiniraya Sutta – Fallecimiento como humanos
[Leer en pali]
[102] Entonces, el Bienaventurado tomó un pequeño trozo de suelo en su uña y se dirigió a los monjes así:
“Monjes, ¿qué creéis que es mayor: este pequeño trozo de suelo en mi uña o esta gran tierra?”.
“Venerable Señor, la gran tierra es mayor. El pequeño trozo de suelo que el Bienaventurado tomó en su uña es insignificante. En comparación con la gran tierra, aquel pequeño trozo del suelo es incalculable e incomparable, incluso con una pequeña fracción de ella”.
“Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen como seres humanos, renacen entre los seres humanos. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen como seres humanos, renacen en el infierno. Y, ¿por qué así? Porque ellos no han visto las Cuatro Nobles Verdades. Y, ¿cuáles son esas cuatro? La noble verdad de la insatisfacción, la noble verdad del origen de la insatisfacción, la noble verdad del cese de la insatisfacción y la noble verdad del sendero que conduce al cese de la insatisfacción.
“Por lo tanto, monjes, hay que hacer el esfuerzo para comprender: ‘Esta es la insatisfacción’… Y hay que hacer el esfuerzo para comprender: ‘Este es el sendero que conduce al cese de la insatisfacción’”.
SN 56,103 Manussacutiniracchana Sutta – Fallecimiento como humanos
[Leer en pali]
[103] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen como seres humanos, renacen entre los seres humanos. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen como seres humanos, renacen en el reino animal…”.
SN 56,104 Manussacutiniracchana Sutta – Fallecimiento como humanos
[Leer en pali]
[104] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen como seres humanos, renacen entre los seres humanos. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen como seres humanos, renacen en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,105-107 Manussacutidevaninirayadi Sutta – Fallecimiento como humanos
[Leer en pali]
[105-107] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen como seres humanos, renacen entre los seres humanos. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen como seres humanos, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,108-110 Devacutininirayadi Sutta – Fallecimiento como devas
[Leer en pali]
[108-110] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen como devas, renacen entre los devas. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen como devas, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,111-113 Devamanussaninirayadi Sutta – Fallecimiento como devas
[Leer en pali]
[111-113] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen como devas, renacen entre los seres humanos. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen como devas, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,114-116 Nirayamanussanirayadi Sutta – Fallecimiento en el infierno
[Leer en pali]
[114-116] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen en el infierno, renacen entre los seres humanos. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen en el infierno, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,117-119 Niraydevanirayadi Sutta – Fallecimiento en el infierno
[Leer en pali]
[117-119] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen en el infierno, renacen entre los devas. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen en el infierno, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,120-122 Tiracchanamanussanirayadi Sutta – Fallecimiento en el reino animal
[Leer en pali]
[120-122] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen en el reino animal, renacen entre los seres humanos. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen en el reino animal, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,123-125 Tiracchanamanussanirayadi Sutta – Fallecimiento en el reino animal
[Leer en pali]
[123-125] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen en el reino animal, renacen entre los devas. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen en el reino animal, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,126-128 Pettimanussanirayadi Sutta – Fallecimiento en el dominio de los espíritus hambrientos
[Leer en pali]
[126-128] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen en el dominio de los espíritus hambrientos, renacen entre los seres humanos. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen en el dominio de los espíritus hambrientos, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,129-130 Pettidevanirayadi Sutta – Fallecimiento en el dominio de los espíritus hambrientos
[Leer en pali]
[129-130] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen en el dominio de los espíritus hambrientos, renacen entre los devas. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen en el dominio de los espíritus hambrientos, renacen en el infierno… en el reino animal… en el dominio de los espíritus hambrientos…”.
SN 56,131 Pettidevapettivisaya Sutta – Fallecimiento en el dominio de los espíritus hambrientos
[Leer en pali]
[131] “… Así también, monjes, son pocos aquellos seres que, cuando fallecen en el dominio de los espíritus hambrientos, renacen entre los devas. Y son más numerosos aquellos seres que, cuando fallecen en el dominio de los espíritus hambrientos, renacen en el dominio de los espíritus hambrientos. Y, ¿por qué así? Porque ellos no han visto las Cuatro Nobles Verdades. Y, ¿cuáles son esas cuatro? La noble verdad de la insatisfacción, la noble verdad del origen de la insatisfacción, la noble verdad del cese de la insatisfacción y la noble verdad del sendero que conduce al cese de la insatisfacción.
“Por lo tanto, monjes, hay que hacer el esfuerzo para comprender: ‘Esta es la insatisfacción’… Y hay que hacer el esfuerzo para comprender: ‘Este es el sendero que conduce al cese de la insatisfacción’”.
FUENTES:
Bhikkhu Bodhi (2000). The Five Destinations Repetition Series en The Connected Discourses of the Buda: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston, Wisdom Publications (versión digital), pp. 2493-2507.
Pancagatipeyyalavagga en Digital Pali Reader 4.0
Traducido por Anton P. Baron
Editado por Federico Angulo y AntonP. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2015.