La diferencia, entre los que alcanzan la meta final bajo la guía del Buda y los de otros credos, radica en el fin de los renacimientos.
[9] En cierta ocasión el asceta errante Vacchagotta se acercó al Bienaventurado e intercambió con él cordiales saludos. Terminadas las cordiales palabras de bienvenida y saludos, se sentó a un lado y dijo al Bienaventurado:
“Recientemente, Maestro Gotama, un grupo de ascetas, brahmanes y ascetas errantes de diferentes credos, se reunió en el salón de debate y, mientras estaban sentados juntos, surgió entre ellos la siguiente conversación: ‘Purana Kassapa, líder de una orden, líder de un grupo, maestro de un grupo, bien conocido y famoso guía espiritual considerado por muchos como un santo, declaró de esta manera el renacimiento de un discípulo fallecido: «Este renació allí y aquel renació allá». Y en el caso de un discípulo que fue una persona elevada, una persona suprema, alguien que alcanzó el logro supremo, cuando esta persona falleció, también declaró su renacimiento de esta manera: «Este renació allí y aquel renació allá».
“‘Por otro lado, Makkhali Gosala… Nigantha Nataputta… Sanjaya Belatthiputta… Pakudha Kaccayana… Ajita Kesakambali, líder de una orden, líder de un grupo, maestro de un grupo, bien conocido y famoso guía espiritual considerado por muchos como un santo, también declaró de esta manera el renacimiento de un discípulo fallecido: «Este renació allí y aquel renació allá». Y en el caso de un discípulo que fue una persona elevada, una persona suprema, alguien que alcanzó el logro supremo, cuando esta persona falleció, también declaró su renacimiento de esta manera: «Este renació allí y aquel renació allá».
“’Pero el asceta Gotama, líder de una orden, líder de un grupo, maestro de un grupo, bien conocido y famoso guía espiritual considerado por muchos como un santo, si bien declaró el renacimiento de un discípulo fallecido de esta manera: «Este renació allí y aquel renació allá»; sin embargo, en el caso de un discípulo que fue una persona elevada, una persona suprema, alguien que alcanzó el logro supremo, cuando esta persona falleció no declaró su renacimiento de esta manera: «Este renació allí y aquel renació allá», más bien declaró: «Él cortó el ansia, rompió los grilletes y, mediante el completo quiebre de la presunción, puso fin a la insatisfacción»’.
“Entonces, Maestro Gotama, esto fue desconcertante para mí y surgió en mí una duda: ‘¿Cómo debe ser entendido el Dhamma del asceta Gotama?’”.
“Es normal que esto sea desconcertante para ti, Vaccha, es normal que en ti surja esta duda. La duda surgió en ti, Vaccha, acerca de un tema desconcertante. Yo declaro el renacimiento de alguien con combustible, no sin combustible”.
“Maestro Gotama, cuando la llama es arrastrada por el viento y se ve desplazada a cierta distancia, ¿qué es lo que el Maestro Gotama declara que es el combustible, en esa ocasión?”.
“Vaccha, cuando la llama es arrastrada por el viento y se ve desplazada a cierta distancia, yo declaro que el combustible es el viento; en esa ocasión el viento es el combustible”.
“Y cuando alguien, Maestro Gotama, depuso este cuerpo, pero aún no ha renacido en otro, ¿qué es lo que el Maestro Gotama declara que es el combustible, en esta ocasión?”.
“Vaccha, cuando alguien depuso este cuerpo, pero aún no ha renacido en algún otro, yo declaro que el combustible es el ansia; en esta ocasión el ansia es el combustible”.
FUENTE:
Bodhi, B. (2000). Sariputta The Debating Hall en The Connected Discourses of the Buddha: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston: Wisdom Publications, (versión digital), p. 1623.
Kutuhalasalasuttam en Digital Pali Reader
Traducción: Anton P. Baron
Edición: Federico Angulo y Anton P. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2015, 2020.