SN 55,7 Veludvareyya Sutta – La gente de la Puerta de Bambú

El Buda enseña, a un grupo de brahmanes laicos, las “siete buenas cualidades y cuatro deseables estados” para alcanzar la entrada-en-la-corriente.

 


[Leer en pali]

[7] Esto he escuchado:

En una ocasión, el Bienaventurado estaba haciendo un recorrido entre los kosala, junto con un gran Sangha de monjes, cuando llegó a un pueblo de brahmanes de los kosala, de nombre Puerta de Bambú. Entonces, los brahmanes, hombres hogareños de la Puerta de Bambú, escucharon esta noticia: “Se dice, señores, que el asceta Gotama, el hijo de los sakia que se hizo renunciante de una familia sakiana, está haciendo un recorrido entre los kosala, junto con un gran Sangha de  monjes, a la Puerta de Bambú. En lo concerniente al maestro Gotama, se ha propagado este buen informe: ‘Aquel Bienaventurado es un Arahant, perfectamente iluminado, realizado en el verdadero conocimiento y la conducta, Afortunado, conocedor del mundo, inigualado líder de los que han de ser amansados, el maestro de los devas y seres humanos, el Iluminado, el Bendito’. Habiendo descubierto por sí mismo, con el conocimiento directo, este mundo con sus devas, Mara y Brahma, esta generación con sus ascetas y brahmanes, sus devas y seres humanos, lo hace conocer a otros. Enseña el Dhamma que es agradable en el comienzo, agradable en el medio y agradable al final, con el recto significado y fraseo; revela la vida santa que es perfectamente completa y pura’. Es realmente bueno ver a semejantes arahants”.

Entonces, aquellos brahmanes, hombres hogareños de la Puerta de Bambú, se acercaron al Bienaventurado, le rindieron homenaje y se sentaron a un lado. Algunos saludaron al Bienaventurado y, al intercambiar con él amables palabras de bienvenida y cordiales saludos, se sentaron a un lado. Otros extendieron las palmas de sus manos juntas hacia el Bienaventurado, en un cordial saludo, y se sentaron a un lado. Otros anunciando al Bienaventurado sus nombres y sus clanes, se sentaron a un lado. Sentados a un lado, aquellos brahmanes, hombres hogareños de la Puerta de Bambú, dijeron al Bienaventurado:

“Maestro Gotama, nosotros tenemos aspiraciones, deseos y esperanzas como estas: ‘Que vivamos en hogares llenos de gente y de niños. Que disfrutemos del sándalo de los kasia. Que nos adornemos con guirnaldas, aromas y ungüentos. Que recibamos oro y plata. Que, con la disolución del cuerpo, después de la muerte, renazcamos en un buen destino, en el mundo celestial’. Puesto que tenemos estas aspiraciones, deseos y esperanzas, que el maestro Gotama nos enseñe el Dhamma, de tal manera que vivamos en hogares llenos de gente y de niños… renazcamos en un buen destino, en el mundo celestial”.

“Voy a enseñaros, hombres hogareños, una exposición del Dhamma aplicable a uno mismo. Escuchad y prestad atención que voy a hablar”.

“Sí, señor”, respondieron aquellos brahmanes de la Puerta de Bambú y el Bienaventurado continuó:

“Y, ¿qué es, hombres hogareños, el Dhamma aplicable a uno mismo? He aquí, hombres hogareños, un noble discípulo reflexiona de esta manera: ‘Soy alguien que desea vivir, que no desea morir; deseo la felicidad y soy reacio al sufrimiento. Puesto que soy alguien que desea vivir, que no desea morir, que deseo la felicidad y soy reacio al sufrimiento, si alguien tomara mi vida, esto no sería placentero ni agradable para mí. Por otro lado, si yo tomara la vida del otro ―de alguien que desea vivir, que no desea morir; que desea la felicidad y es reacio al sufrimiento―, esto tampoco sería placentero ni agradable para él. Lo que es desplaciente y desagradable para otro, es desplaciente y desagradable también para mí. ¿Cómo puedo infligir a otro lo que es desplaciente y desagradable para mí?’. Habiendo reflexionado de esta forma, él mismo se abstiene de destruir la vida, exhorta a otros que se abstengan de destruir la vida y habla alabanzas sobre la abstención de la destrucción de la vida. De esta manera, su conducta corporal se purifica en tres aspectos.

“Además, un noble discípulo reflexiona de esta manera: ‘Si alguien tomara de mí, lo que no le ha sido dado, es decir, cometiera robo, esto no sería placentero ni agradable para mí. Por otro lado, si yo tomara del otro lo que no me ha sido dado, es decir, cometiera robo, esto tampoco sería placentero ni agradable para él. Lo que es desplaciente y desagradable para otro, es desplaciente y desagradable también para mí. ¿Cómo puedo infligir a otro lo que es desplaciente y desagradable para mí?’. Habiendo reflexionado de esta forma, él mismo se abstiene de tomar lo que no le ha sido dado, exhorta a otros que se abstengan de tomar lo que no les ha sido dado y habla alabanzas sobre la abstención de tomar lo que a uno le ha sido dado. De esta manera, su conducta corporal se purifica en tres aspectos.

“Además, un noble discípulo reflexiona de esta manera: ‘Si alguien cometiera adulterio con mis mujeres, esto no sería placentero ni agradable para mí. Por otro lado, si yo cometiera adulterio con las mujeres del otro, esto tampoco sería placentero ni agradable para él. Lo que es desplaciente y desagradable para otro, es desplaciente y desagradable también para mí. ¿Cómo puedo infligir a otro lo que es desplaciente y desagradable para mí?’. Habiendo reflexionado de esta forma, él mismo se abstiene de las relaciones sexuales inapropiadas, exhorta a otros que se abstengan de tener relaciones sexuales inapropiadas y habla alabanzas sobre la abstención de las relaciones sexuales inapropiadas. De esta manera, su conducta corporal se purifica en tres aspectos.

“Además, un noble discípulo reflexiona de esta manera: ‘Si alguien perjudicara mi bienestar con la mentira, esto no sería placentero ni agradable para mí. Por otro lado, si yo perjudicara el bienestar de otro con la mentira, esto tampoco sería placentero ni agradable para él. Lo que es desplaciente y desagradable para otro, es desplaciente y desagradable también para mí. ¿Cómo puedo infligir a otro lo que es desplaciente y desagradable para mí?’. Habiendo reflexionado de esta forma, él mismo se abstiene de decir mentiras, exhorta a otros que se abstengan de decir mentiras y habla alabanzas sobre la abstención de decir mentiras. De esta manera, su conducta verbal se purifica en tres aspectos.

“Además, un noble discípulo reflexiona de esta manera: ‘Si alguien me separara de mis amigos con una divisiva forma de hablar, esto no sería placentero ni agradable para mí. Por otro lado, si yo separara al otro de sus amigos con una divisiva forma de hablar, esto tampoco sería placentero ni agradable para él. Lo que es desplaciente y desagradable para otro, es desplaciente y desagradable también para mí. ¿Cómo puedo infligir a otro lo que es desplaciente y desagradable para mí?’. Habiendo reflexionado de esta forma, él mismo se abstiene de practicar una divisiva forma de hablar, exhorta a otros que se abstengan de practicar una divisiva forma de hablar y habla alabanzas sobre la abstención de practicar una divisiva forma de hablar. De esta manera, su conducta verbal se purifica en tres aspectos.

“Además, un noble discípulo reflexiona de esta manera: ‘Si alguien se dirigiera a mí con una áspera forma de hablar, esto no sería placentero ni agradable para mí. Por otro lado, si yo me dirigiera al otro con una áspera forma de hablar, esto tampoco sería placentero ni agradable para él. Lo que es desplaciente y desagradable para otro, es desplaciente y desagradable también para mí. ¿Cómo puedo infligir a otro lo que es desplaciente y desagradable para mí?’. Habiendo reflexionado de esta forma, él mismo se abstiene de practicar una áspera forma de hablar, exhorta a otros que se abstengan de practicar una áspera forma de hablar y habla alabanzas sobre la abstención de practicar una áspera forma de hablar. De esta manera, su conducta verbal se purifica en tres aspectos.

“Además, un noble discípulo reflexiona de esta manera: ‘Si alguien se dirigiera a mí con palabras ociosas y frívolas, esto no sería placentero ni agradable para mí. Por otro lado, si yo me dirigiera al otro con  palabras ociosas y frívolas, esto tampoco sería placentero ni agradable para él. Lo que es desplaciente y desagradable para otro, es desplaciente y desagradable también para mí. ¿Cómo puedo infligir a otro lo que es desplaciente y desagradable para mí?’. Habiendo reflexionado de esta forma, él mismo se abstiene de  charlas frívolas, exhorta a otros que se abstengan de charlas frívolas y habla alabanzas sobre la abstención de las charlas frívolas. De esta manera, su conducta verbal se purifica en tres aspectos.

“Además, posee una firme confianza en el Buda de esta manera: ‘El Bienaventurado es un Arahant perfectamente iluminado, consumado en el conocimiento verdadero y la conducta, Afortunado, conocedor del mundo, insuperable preparador de personas que han de ser amansadas, maestro de los devas y seres humanos, un Iluminado, un Bendito’.

“Además, posee una firme confianza en el Dhamma de esta manera: ‘El Dhamma está bien expuesto por el Bienaventurado, es directamente visible, inmediato e invita a uno a venir y ver, es aplicable y personalmente experimentable por el sabio’.

“Además, posee una firme confianza en el Sangha de esta manera: ‘El Sangha de los discípulos del Bienaventurado practica de buena manera, practica de manera recta, practica de manera verdadera, practica de manera apropiada; es decir, los cuatro pares de personas, las ocho clases de individuos; este Sangha de los discípulos del Bienaventurado es digno de recibir ofrendas, digno de hospitalidad, digno de donativos, digno de reverenciales saludos y es un inigualable campo de méritos para el mundo’.

“Además, posee una conducta virtuosa, querida por los nobles, inquebrantable, perfecta, sin mancha, intachable, liberada, alabada por los sabios, no aferrada y que conduce a la concentración.

“Hombres hogareños, cuando el noble discípulo posee estas siete buenas cualidades y estos cuatro deseables estados, si así lo desease, podría declarar esto de sí mismo: ‘Soy alguien que ha terminado con el infierno, ha terminado con el reino animal, ha terminado con el dominio de los espíritus hambrientos, ha terminado con el plano de la miseria, con el mal destino, con el mundo bajo. Soy uno que entra-en-la-corriente, no ligado más al mundo bajo, con un destino fijo, con la iluminación como mi destino’”.

Cuando se dijo esto, los brahmanes, hombres hogareños de la Puerta de Bambú, dijeron:

“¡Excelente, maestro Gotama! ¡Excelente, maestro Gotama! El maestro Gotama esclareció el Dhamma de diferentes maneras, como si enderezara lo que estaba torcido, revelara lo que estaba oculto, mostrara el camino a los que estaban perdidos o sostuviera una lámpara en medio de la oscuridad, de manera tal que los de buena vista pudieran ver las formas. Ahora vamos por refugio al maestro Gotama, al Dhamma y al Sangha de los monjes. Que el maestro Gotama nos considere como sus seguidores laicos a partir de ahora, que han ido por refugio de por vida”.

 


FUENTES:

Bhikkhu Bodhi (2000). The People of Bamboo Gate en The Connected Discourses of the Buda: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston, Wisdom Publications (versión digital), pp. 2305-2307.   

Veludvareyyasuttam en Digital Pali Reader 4.0


Traducido por Anton P. Baron

Editado por Federico Angulo y Anton Baron

Publicación de Bosque Theravada, 2015.