El Venerable Mahakassapa es un ejemplo para los monjes, en cuanto a su forma de relacionarse con las personas laicas y de predicar el Dhamma.
[3] En Savatthi.
“Monjes, vosotros debéis acercaros a las familias como la luna: retrocediendo con el cuerpo y la mente [1], actuando siempre como recién llegados, sin descaro hacia las familias. Al igual que cuando un hombre mira hacia abajo a un viejo pozo, un precipicio o una ribera empinada, hace retroceder su cuerpo y su mente, así también vosotros, monjes, debéis acercaros a las familias como la luna: retrocediendo con el cuerpo y la mente, actuando siempre como recién llegados, sin descaro hacia las familias.
“Monjes, Kassapa se acerca a las familias como la luna: retrocediendo con el cuerpo y la mente, actuando siempre como recién llegado, sin descaro hacia las familias. ¿Qué opináis, monjes? ¿Qué clase de monje es digno a acercarse a las familias?”.
“Venerable Señor, nuestras enseñanzas están arraigadas en el Bienaventurado, guiadas por el Bienaventurado, toman recurso en el Bienaventurado. Sería bueno que el Bienaventurado nos aclarase el significado de esta declaración. Habiendo escuchado esto de él, los monjes lo van a recordar”.
Entonces, el Bienaventurado agitó su mano en el aire y dijo:
“Monjes, al igual que esta mano no se queda atrapada en el aire, no se sostiene en él ni está vinculada a él, así, también, cuando un monje se acerca a las familias, su mente no se queda atrapada por las familias, sostenida en las familias ni vinculada a ellas, sino que piensa: ‘Que aquellos que desean ganancias consigan ganancias y, que aquellos que desean méritos, consigan méritos’. Es feliz y exaltado de las ganancias de los demás, como si fueran suyas propias. Semejante monje es digno de acercarse a las familias.
“Monjes, cuando Kassapa se acerca a las familias, su mente no se queda atrapada por las familias, sostenida en las familias ni vinculada a ellas, sino que piensa: ‘Que aquellos que desean ganancias consigan ganancias y, que aquellos que desean méritos, consigan méritos’. Es feliz y exaltado de las ganancias de los demás, como si fueran suyas propias.
“¿Qué opináis, monjes? ¿Cómo la enseñanza del Dhamma de un monje es impura y cómo su enseñanza del Dhamma es pura?”.
“Venerable Señor, nuestras enseñanzas están arraigadas en el Bienaventurado… Habiendo escuchado esto de él, los monjes lo van a recordar”.
“Entonces escuchad, monjes, y prestad atención que voy a hablar”.
“Sí, Venerable Señor”, respondieron aquellos monjes y el Bienaventurado continuó:
“Un monje enseña el Dhamma a otros con este pensamiento: ‘¡Que escuchen el Dhamma de mi parte! Habiéndolo escuchado, que ganen confianza en el Dhamma. Siendo confiados, mostrarán también confianza hacia mí’. Semejante enseñanza del Dhamma, [por parte] de aquel monje, es impura.
“Pero otro monje enseña el Dhamma a otros con este pensamiento: ‘El Dhamma está bien expuesto por el Bienaventurado, directamente visible, inmediato, que invita a uno a venir y ver, aplicable, experimentable personalmente por el sabio. ¡Que escuchen el Dhamma de mi parte! Habiéndolo escuchado, entenderán el Dhamma. Habiéndolo entendido, practicarán de acuerdo’. De esta manera, enseña el Dhamma a otros por la intrínseca excelencia del Dhamma, enseña el Dhamma a otros por compasión y caridad, por susceptible preocupación. Semejante enseñanza del Dhamma, [por parte] de aquel monje, es pura.
“Monjes, Kassapa enseña el Dhamma a otros con este pensamiento: ‘El Dhamma está bien expuesto por el Bienaventurado… ¡Que escuchen el Dhamma de mi parte! Habiéndolo escuchado, entenderán el Dhamma. Habiéndolo entendido, practicarán de acuerdo’. De esta manera, enseña el Dhamma a otros por la intrínseca excelencia del Dhamma, enseña el Dhamma a otros por compasión y caridad, por susceptible preocupación.
“Monjes, os exhorto a través del ejemplo de Kassapa o de alguien similar a Kassapa. Siendo así exhortados, deberíais practicar en concordancia con eso”.
NOTA:
[1] Según los Comentarios, el monje retrocede con el cuerpo cuando vive en el bosque (en vez de vivir en el pueblo) y, con la mente, cuando se refrena de los pensamientos sensuales y otros perjudiciales estados mentales.
FUENTE:
Bodhi, B. (2000). Content en The Connected Discourses of the Buddha: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston: Wisdom Publications, (versión digital), pp. 852-853.
Candupamasuttam en Digital Pali Reader
Traducción: Anton P. Baron
Edición: Federico Angulo y Anton P. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2015.