Un símil sobre la duración del samsara que debe conducir a la liberación.
[2] En Savatthi.
“Monjes, este samsara es sin comienzo discernible. El primer momento de esta itinerancia y vagabundeo, obstaculizado por la ignorancia y encadenado por el deseo de los seres, no es discernible. Imaginad, monjes, que un hombre redujera esta gran tierra a unas bolas de arcilla del tamaño de granos de azufaifo y las colocara abajo, diciendo [a cada una de ellas]: ‘Este es mi padre, este es el padre de mi padre’. La secuencia de los padres y abuelos de aquel hombre no tendría fin, y esta gran tierra podría seguir siendo usada y no terminaría. Y, ¿por qué así? Porque, monjes, este samsara es sin un comienzo discernible. El primer momento de esta itinerancia y vagabundeo, obstaculizado por la ignorancia y encadenado por el deseo de los seres, no es discernible. Por semejante largo tiempo, monjes, habéis experimentado el sufrimiento, la angustia, el desastre y el hecho de hincharse en los cementerios. Esto es suficiente como para experimentar repugnancia hacia todas las formaciones, suficiente para llegar a ser desapasionados hacia ellas, suficiente para liberarse de ellas”.
FUENTES:
Bhikkhu Bodhi (2000). «The Earth», en The Connected Discourses of the Buda: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston, Wisdom Publications.
Pathavisuttam en Digital Pali Reader 4.1.
Traducido por Anton P. Baron
Editado por Federico Angulo y Anton P. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2014.