Sakka, el gobernador de los devas, ganó su lugar cuando era todavía un ser humano, mediante el cumplimiento de los siete votos que encarnan los estándares del hombre hogareño virtuoso.
[11] En Savatthi.
“Monjes, una vez en el pasado remoto, cuando Sakka, el señor de los devas era un ser humano, adoptó los siete votos y se comprometió con ellos. Y al haberse comprometido con ellos, alcanzó el estatus de Sakka. Y, ¿cuáles son esos siete?
“’Mientras viva voy a ayudar a mis padres. Mientras viva voy a respetar a los ancianos de la familia. Mientras viva voy a hablar con gentileza. Mientras viva no voy a usar el habla que pueda traer divisiones. Mientras viva voy a morar en el hogar con mente que evite la mancha de la tacañería, libre y generosa, de mano abierta, que se deleite en el renunciamiento, devota a la caridad, que se deleite en dar y compartir. Mientras viva voy a hablar la verdad. Mientras viva voy a ser libre de la ira y, si la ira surgiese en mí, la disiparé rápidamente’.
“En el pasado remoto, monjes, cuando Sakka, el señor de los devas, era un ser humano, adoptó estos siete votos y se comprometió con ellos. Y al haberse comprometido con ellos, alcanzó el estatus de Sakka.
“Cuando una persona ayuda a sus padres,
Y respeta a los ancianos de la familia;
Cuando su habla es gentil y cortés,
Y se refrena del habla que causa divisiones;
“Cuando se esfuerza en la remoción de la mezquindad,
Es veraz y hace desaparecer la ira,
Los devas del Tavatimsa le llaman
Una persona realmente superior”.
FUENTE:
Bodhi, B. (2000). «Vows», en The Connected Discourses of the Buddha: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston, Wisdom Publications, p. 503.
«Vatapadasuttam» en Digital Pali Reader
Traducción: Anton P. Baron
Edición: Federico Angulo y Anton P. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2015.