Dejar el Dhamma es como descarrilarse de un buen camino.
[22] Estando a un lado, Khema, un joven deva, recitó estos versos en presencia del
Bienaventurado:
“Gente tonta evita la sabiduría,
Se comporta como si fuera enemiga de sí misma.
Ellos andan haciendo acciones malignas,
Que sólo traen frutos amargos.
“Aquella acción no está bien hecha,
De la cual, una vez llevada a cabo, trae arrepentimiento,
Cuyo resultado uno experimenta
Llorando, con el rostro lleno de lágrimas.
“Pero aquella acción está bien hecha,
De la cual, una vez llevada a cabo, no trae arrepentimiento,
Cuyo resultado uno experimenta
Dichoso, con la mente feliz”.
[El Bienaventurado:]
“Uno debe realizar prontamente las acciones
Que sabe que conducen a su propio bienestar;
El pensador, el sabio, no debe avanzar
Con la reflexión del carretero.
“Como el carretero que dejó la carretera,
Un camino con la superficie plana,
Y, entrando en una vereda escarpada,
Cavila tristemente con un eje roto.
“Así también el tonto, habiendo dejado el Dhamma
Sigue el camino opuesto,
Y cuando cae en la boca de la Muerte,
Cavila como el carretero con el eje roto”.
FUENTE:
Bodhi, B. (2000). Khema en The Connected Discourses of the Buddha: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston, EE.UU.: Wisdom Publications (versión digital), pp. 211-212.
Khemasuttam en Digital Pali Reader
Traducción: Anton P. Baron
Edición: Federico Angulo y Anton P. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2015.