Consejos del Ven. Mahakaccana sobre el resguardo de los sentidos.
[132] {132} En una ocasión, el Venerable Mahakaccana estaba morando entre la gente de Avanti, en una cabaña del bosque de Makkarakata. Entonces, un número de jóvenes brahmanes, estudiantes del brahmán Lohicca, mientras recogían leña, se acercaron a la cabaña del Venerable Mahakaccana. Habiéndose acercado, empezaron a pisotear y pisar fuerte alrededor de la cabaña, y jugar algunas bromas de manera ruidosa y bulliciosa, diciendo: ‘estos ascetas pelados, domésticos, hijos morenos de los pies del Señor [1] son honrados, respetados, estimados, alabados y venerados por sus serviles devotos».
Entonces, el Venerable Mahakaccana salió de su morada y dijo a aquellos jóvenes brahmanes: «No hagáis tanto ruido, muchachos. Voy a hablaros sobre el Dhamma.» Cuando se dijo esto, aquellos jóvenes brahmanes se silenciaron. Entonces, el Venerable Mahakaccana se dirigió a estos jóvenes en verso:
Aquellos hombres de edad excelsos en la virtud,
Aquellos brahmanes que se acuerdan de las reglas ancestrales,
Tienen las puertas de sus sentidos bien vigiladas,
Moran, habiendo apaciguado la cólera dentro de ellos.
Se deleitan en el Dhamma y en los jhanas,
Aquellos brahmanes que se acuerdan de las reglas ancestrales.
Pero éstos han caído, los que reclaman: ‘nosotros recitamos’.
Hinchados por el clan, yendo incorrectamente,
Sobrepasado por el odio, armados de diversos artefactos,
Molestan a ambos: a los frágiles y a los firmes.
Para alguien con las puertas de los sentidos desguarnecidas,
Todo es estéril,
Al igual que las riquezas ganadas en el sueño:
Dormir rápido y en el suelo,
Bañarse al amanecer, estudiar los tres Vedas,
Las pieles ásperas, cabellos enmarañados y sucios,
Himnos, reglas, votos y austeridades,
Hipocresía, inclinaciones, abluciones;
Todos estos emblemas brahmánicos
Se usan para incrementar las ganancias mundanas.
Pero la mente bien concentrada,
Clara y libre de manchas,
Se extiende a todos los seres sintientes;
Este es el camino para alcanzar al Brahma.
Entonces, aquellos jóvenes brahmanes, airados y disgustados, se acercaron al brahmán Lohicca y le dijeron: «Mire ahora, señor, usted debería saber que este asceta Mahakaccana denigró y desdeñó de manera categórica a los himnos de los brahmanes.»
Cuando se dijo esto, el brahmán Lohicca se puso furioso y disgustado. Pero entonces, se le ocurrió lo siguiente: ‘no es apropiado para mí abusar y regañar al asceta Mahakaccana solamente sobre la base de lo que había oído de estos jóvenes. Voy a acercarme a él para interrogarle».
Acto seguido, el brahmán Lohicca junto con aquellos jóvenes brahmanes, se acercó al Venerable Mahakaccana e intercambió con él cordiales saludos. Cuando estas coretes y amables palabras de bienvenida habían concluido, se sentó a un lado y le dijo: «Maestro Kaccana, ¿había llegado aquí un número de jóvenes brahmanes, estudiantes míos, mientras recogían leña?»
«Así fue, brahmán».
«Y, ¿tuvo el maestro Kaccana alguna conversación con ellos?»
«Sí, he tenido una conversación con ellos, brahmán».
«¿Qué clase de conversación ha tenido el maestro Kaccana con ellos?»
«La conversación que he tenido con ellos fue esta:
«Aquellos hombres de edad excelsos en la virtud,
Aquellos brahmanes que se acuerdan de las reglas ancestrales…
Pero la mente bien concentrada,
Clara y libre de manchas,
Se extiende a todos los seres sintientes;
Este es el camino para alcanzar al Brahma.»
«Esta es la clase de conversación que he tenido con aquellos jóvenes».
«Maestro Kaccana, ¿has dicho ‘las puertas de los sentidos desguarnecidas’. ¿De qué manera, maestro Kaccana, uno está ‘con las puertas de los sentidos desguarnecidas’?»
«He aquí, brahmán, habiendo visto la forma con el ojo, alguien está decidido por la forma placentera y repelido por la forma desagradable. Él mora sin establecer la atención consciente del cuerpo, con una mente limitada, y no comprende cómo realmente es la liberación de la mente, la liberación a través de la sabiduría, donde los malos e insalubres estados cesan por completo. Habiendo escuchado el sonido con el oído… Habiendo olfateado el olor con la nariz… Habiendo degustado el sabor con la lengua… Habiendo sentido una sensación táctil con el cuerpo… Habiendo conocido un fenómeno con la mente, alguien está decidido por fenómeno placentero y repelido por el fenómeno desagradable. Él mora sin establecer la atención consciente del cuerpo, con una mente limitada, y no comprende cómo realmente es la liberación de la mente, la liberación a través de la sabiduría, donde los malos e insalubres estados cesan por completo. Es de esta manera, brahmán, que uno está ‘con las puertas de los sentidos desguarnecidas'».
«¡Esto es magnífico, maestro Kaccana! ¡Esto es asombroso! Cómo el maestro Kaccana describió a alguien, cuyas puertas de los sentidos realmente están desguarnecidas, alguien que llega a ser ‘uno con las puertas de los sentidos desguarnecidas’. Pero, el maestro Kaccana también ha dicho ‘las puertas de los sentidos vigiladas’. ¿De qué manera, maestro Kaccana, uno está ‘con las puertas de los sentidos vigiladas’?»
«He aquí, brahmán, habiendo visto la forma con el ojo, alguien no está decidido por la forma placentera ni repelido por la forma desagradable. Él mora, habiendo establecido la atención consciente del cuerpo, con una mente ilimitada, y comprende cómo realmente es la liberación de la mente, la liberación a través de la sabiduría, donde los malos e insalubres estados cesan por completo. Habiendo escuchado el sonido con el oído… Habiendo olfateado el olor con la nariz… Habiendo degustado el sabor con la lengua… Habiendo sentido una sensación táctil con el cuerpo… Habiendo conocido un fenómeno con la mente, alguien no está decidido por fenómeno placentero ni repelido por el fenómeno desagradable. Él mora, habiendo establecido la atención consciente del cuerpo, con una mente ilimitada, y comprende cómo realmente es la liberación de la mente, la liberación a través de la sabiduría, donde los malos e insalubres estados cesan por completo. Es de esta manera, brahmán, que uno está ‘con las puertas de los sentidos vigiladas'».
«¡Esto es magnífico, maestro Kaccana! ¡Esto es asombroso! Cómo el maestro Kaccana describió a alguien, cuyas puertas de los sentidos realmente están vigiladas, alguien que llega a ser ‘uno con las puertas de los sentidos vigiladas’.
«¡Magnífico maestro Kaccana! ¡Magnífico maestro Kaccana! El Dhamma ha sido esclarecido de muchas formas por el maestro Kaccana; es como si se enderezara lo que estaba torcido, como si se revelara lo que estaba oculto, como si se mostrara el camino al que estaba perdido, como si se sostuviera una lámpara en la oscuridad para que los de buena vista pudieran ver. Maestro Kaccana, voy por refugio al Bienaventurado, al Dhamma y al Sangha de los monjes. De hoy en adelante, que el maestro Kaccana me recuerde como el discípulo laico que han ido por refugio de por vida.
«Que el maestro Kaccana se acerque a la familia de Lohicca así como se acerca a la familia del seguidor laico Makkarakata. Los jóvenes brahmanes y las doncellas van a rendirle homenaje al maestro Kaccana, por el respeto, van a estar de pie delante de él, van a ofrecerle asiento y el agua, lo cual les conducirá al bienestar y felicidad por largo tiempo.»
NOTA:
[1] Son términos denigrantes. Este ultimo alude a la idea brahmánica, según la cual, el Brahma creó a los ascetas de las plantas de sus pies, mientras que a los brahmanes, de su boca.
FUENTES:
Bhikkhu Bodhi (2000) «Lohicca» en The Connected Discourses of the Buda: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston, Wisdom Publications. Págs. 1201-1204.
«Lohiccasutta» en World Tipitaka Edition, http://studies.worldtipitaka.org/tipitaka/13S4/1/1.3/1.3.3/1.3.3.9 13 de mayo de 2008
Traducido y editado por Anton P. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2010.