El rol de las ganancias, la honra y los elogios en el cisma de Devadatta.
[35] En una ocasión el Bienaventurado estaba morando en el monte Pico de Buitre, cerca de Rajagaha, no mucho después de que Devadatta se hubiese ido. Entonces, en referencia a Devadatta, el Bienaventurado se dirigió así a los monjes:
“Monjes, las ganancias, la honra y los elogios de Devadata surgieron para su propia caída y destrucción. Al igual que el plátano, el bambú o la caña, producen frutos para su propia caída y destrucción, así también las ganancias, la honra y los elogios de Devadata surgieron para su propia caída y destrucción. Al igual que una mula se preña para su propia caída y destrucción, así también las ganancias, la honra y los elogios de Devadata surgieron para su propia caída y destrucción.
“Así de espantosas, monjes, son las ganancias, la honra y los elogios; amargos, viles y obstructivos en cuanto al logro de la insuperable liberación de la esclavitud. Por eso, monjes, así deberíais entrenaros a vosotros mismos: ‘Vamos a abandonar las ganancias, la honra y los elogios ya surgidos, y no vamos a dejar que surjan las ganancias, la honra y los elogios, ni que persistan obsesionando nuestra mente’. Así deberíais entrenaros a vosotros mismos”.
Esto es lo que el Bienaventurado dijo y, habiendo dicho esto, el Afortunado, el Maestro, agregó:
“Así como su propia fruta trae destrucción
Al plátano, al bambú o la caña,
Así como el embrión destruye a la mula,
Así las honras destruyen al canalla”.
FUENTE:
Bodhi, B. (2000). Not Long After He Left en The Connected Discourses of the Buddha: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston: Wisdom Publications, (versión digital), p. 907.
Acirapakkantasuttam en Digital Pali Reader
Traducción: Anton P. Baron
Edición: Federico Angulo y Anton P. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2015.