La atención de uno debería ser tal como si estuviera atravesado por una lanza.
El Bienaventurado residía en Savatthi… Estando en un lugar adecuado, el deva habló de esta manera en verso en presencia del Bienaventurado:
Así como alguien traspasado por una lanza,
o como alguien cuya cabeza está ardiendo,
así mismo un monje lleva una vida atenta
para abandonar los apegos sensibles.
[El Bienaventurado:]
Así como alguien traspasado por una lanza,
o como alguien cuya cabeza está ardiendo,
así mismo un monje debería llevar una vida atenta
para abandonar la ilusión del sí mismo.
FUENTE:
U Tin U (Myaung), Yangon.
Editado por el Comité Editorial de Tipitaka Association, Burma (Myanmar), 1998. http://www.dhammaweb.net/Tipitaka/read.php?id=190
Traducido del inglés por Albert Biayna Gea.
Publicación de Bosque Theravada, 2010.