Siempre negatifo, nunca positifo

Estas eran las palabras del infame Van Gaal, antiguo entrenador del Fútbol Club Barcelona, cuando los periodistas le acosaban a preguntas. Se quejaba de que en España la gente era muy negativa, y que siempre sacaba lo peor de cada situación.

Una sensación similar  se me queda cuando oigo a las personas de mi alrededor criticar a la Iglesia Católica por sus cuestionables puntos de vista en temas socialmente conflictivos. Una frase que escucho a menudo es «¿Y dónde pone eso en la Biblia?». Casi te da la sensación de que todo el mundo se ha leído la Biblia, y la aplican a todos los aspectos de su vida, pero esto no es así. Es muy fácil criticar lo negativo, pero, ¿qué pasa con toda esa sabiduría que te encuentras dispersada por toda la Biblia?

Todo esto viene a colación de un fragmento del Evangelio de San Mateo que me encontré mientras echaba un vistazo al libro The Good Heart, del Dalai Lama, donde Su Santidad interpreta algunos textos del evangelio desde un punto de vista budista (Mahayana, claro). El texto en cuestión es este:

«Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente.
Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra;
y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa;
y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos.
Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.
Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;
para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.
Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos?
Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles?
Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.»

Mateo  5 : 38-48

Wow. Se me ponen los pelos de punta solo de pensar en poder llegar a alcanzar eso que dice ahí: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra. Solo con estas líneas ya tendríamos para una vida entera de práctica. Pero, ya que estamos, os copio un fragmento de otro chico que conocemos un poco mejor, aunque nació un poco antes que Jesús:

«Monjes, incluso si unos bandidos viniesen a cortaros salvajemente, miembro a miembro, con una sierra de dos manos, aquel de vosotros que dejase que su corazón se enfadase incluso ante eso no estaría siguiendo mis enseñanzas. Incluso entonces deberíais entrenaros así: ‘Nuestras mentes no serán alteradas y no emitiremos palabras malvadas. Permaneceremos compasivos, con una mente llena de buena voluntad, y sin ningún odio interno. Seguiremos llenando a esta gente con amor incondicional y, empezando por ellos, seguiremos llenando a todo el mundo con amor incondicional, abundante, exaltada, inconmensurable, libre de hostilidad y de mala voluntad.’ Así es como deberíais entrenaros.»

 MN21, El símil de la sierra (traducido de aquí)

 ¿Nos atrevemos?