SN 12,2 Vibhanga Sutta – Discurso con el análisis [del origen dependiente]

El resumen de la doctrina del origen dependiente con el breve análisis de cada uno de los doce elementos de la cadena.

[Leer en pali]

En Savatthi. “Monjes, voy a enseñaros el origen dependiente y voy a analizarlo para vosotros. Escuchad y prestad atención, que voy a hablar”.

“Sí, venerable señor”, respondieron los monjes y el Bienaventurado continuó:

“Y ¿cuál es el origen dependiente? Con ignorancia como condición, surgen las formaciones volitivas. Con las formaciones volitivas como condición, surge la conciencia. Con la conciencia como condición, surgen el nombre y la forma. Con el nombre y la forma como condición, surge la séxtuple base de los sentidos. Con la séxtuple base de los sentidos como condición, surge el contacto. Con el contacto como condición, surge la sensación. Con la sensación como condición, surge la avidez. Con la avidez como condición, surge el apego. Con el apego como condición, surge la existencia. Con la existencia como condición, surge el nacimiento. Con el nacimiento como condición, surge la vejez y la muerte, el dolor, el lamento, la pena, la angustia y la desesperanza. Todo aquello, origina esta gran masa del sufrimiento.

“¿Y qué es, monjes, la vejez y la muerte? La vejez de varios seres y varios grupos de seres, su envejecimiento, la pérdida de sus dientes, la blancura de sus cabellos, las arrugas de su piel, el declive de su vitalidad, la degradación de sus facultades: todo esto es llamado ‘la vejez’. La muerte de varios seres y varios grupos de seres, su fallecimiento, su defunción, su expiración, la mortalidad, la muerte, el fin de sus días, la extinción de los componentes [khandas ], la caída de la carcasa: todo esto es llamado ‘muerte’. Esta vejez, en conjunto con esta muerte, son llamados ‘la vejez y la muerte’.

“¿Y qué es, monjes, el nacimiento? El nacimiento de varios seres y varios grupos de seres, su llegar a nacer, su descenso [al útero materno], su llegar a existir, la aparición de los componentes [khandas ], la obtención de la base de los sentidos: todo esto es llamado ‘el nacimiento’.

“¿Y qué es, monjes, la existencia? He aquí, hay tres clases de existencia: la existencia en la esfera de los sentidos, la existencia en la esfera de las formas y la existencia en la esfera sin formas. Todo esto es llamado ‘la existencia’.

“¿Y qué es, monjes, el apego? He aquí, hay cuatro clases de apego: apego a los placeres sensuales, apego a los puntos de vista, apego a preceptos y prácticas, apego a la doctrina del alma. Todo esto es llamado ‘el apego’.

“¿Y qué es, monjes, la avidez? He aquí, hay seis clases de avidez: avidez por las formas, avidez por los sonidos, avidez por los olores, avidez por los sabores, avidez por los objetos táctiles, avidez por los fenómenos mentales. Todo esto es llamado ‘la avidez’.

“¿Y qué es, monjes, la sensación? He aquí, hay seis clases de sensación: sensación que surge por el contacto con el ojo, sensación que surge por el contacto con el oído, sensación que surge por el contacto con la nariz, sensación que surge por el contacto con la lengua, sensación que surge por el contacto con el cuerpo, sensación que surge por el contacto con la mente. Todo esto es llamado ‘la sensación’.

“¿Y qué es, monjes, el contacto? He aquí, hay seis clases de contacto: contacto del ojo, contacto del oído, contacto de la nariz, contacto de la lengua, contacto del cuerpo, contacto de la mente. Todo esto es llamado ‘el contacto’.

“¿Y qué es, monjes, la séxtuple base? La base del ojo, la base del oído, la base de la nariz, la base de la lengua, la base del cuerpo, la base de la mente. Todo esto es llamado ‘la séxtuple base’.

“¿Y qué son, monjes, el nombre y la forma? La sensación, la percepción, la volición, el contacto y la atención: Todo esto es llamado ‘el nombre’. Los cuatro grandes elementos y las formas que derivan de ellos, son llamados ‘forma’. Este nombre, en conjunto con esta forma, son llamados ‘el nombre y la forma’.

“¿Y qué es, monjes, la conciencia? He aquí, hay seis clases de conciencia: conciencia del ojo, conciencia del oído, conciencia de la nariz, conciencia de la lengua, conciencia del cuerpo, conciencia de la mente. Todo esto es llamado ‘la conciencia’.

“¿Y qué son, monjes, las formaciones volitivas? He aquí, hay tres clases de formaciones volitivas: formaciones volitivas corporales, formaciones volitivas verbales y formaciones volitivas mentales. Todo esto es llamado ‘las formaciones volitivas’.

“¿Y qué es, monjes, la ignorancia? No conocer el sufrimiento, no conocer el origen del sufrimiento, no conocer el cese del sufrimiento y no conocer el sendero que conduce al cese del sufrimiento. Todo esto es llamado ‘la ignorancia’.

“Así es, monjes, como con la ignorancia como condición, surgen las formaciones volitivas. Con las formaciones volitivas como condición, surge la conciencia. Con la conciencia como condición, surgen el nombre y la forma. Con el nombre y la forma como condición, surge la séxtuple base de los sentidos. Con la séxtuple base de los sentidos como condición, surge el contacto. Con el contacto como condición, surge la sensación. Con la sensación como condición, surge la avidez. Con la avidez como condición, surge el apego. Con el apego como condición, surge la existencia. Con la existencia como condición, surge el nacimiento. Con el nacimiento como condición, surge la vejez y la muerte, el dolor, el lamento, la pena, la angustia y la desesperanza. Todo aquello, origina esta gran masa del sufrimiento.

“Pero, con la disminución y el cese definitivo de la ignorancia, llega el cese de las formaciones volitivas. Con el cese de las formaciones volitivas, llega el cese de la conciencia. Con el cese de la conciencia, llega el cese del nombre y de la forma. Con el cese del nombre y de la forma, llega el cese de la séxtuple base de los sentidos. Con el cese de la séxtuple base de los sentidos, llega el cese del contacto. Con el cese del contacto, llega el cese de la sensación. Con el cese de la sensación, llega el cese de la avidez. Con el cese de la avidez, llega el cese del apego. Con cese del apego, llega el cese de la existencia. Con el cese de la existencia, llega el cese del nacimiento. Con el cese del nacimiento, también cesa la vejez y la muerte, el dolor, el lamento, la pena, la angustia y la desesperanza. Cesa todo aquello, que origina esta gran masa del sufrimiento.


FUENTES:

Bhikkhu Bodhi (2000) “Analysis of Dependent Origination” en The Connected Discourses of the Buddha: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston, Wisdom Publications. Págs. 534-536.

Thanissaro Bhikkhu [en línea] Paticca-samuppada-vibhanga Sutta: Analysis of Dependent Co-arising . (18/06/2006)

«Vibhangasutta» [en línea] en World Tipitaka Edition. http://studies.worldtipitaka.org/tipitaka/12S2/1/1.1/1.1.2 (13/05/2008)


Traducido y editado por Anton P. Baron

Publicación de Bosque Theravada, 2008.