Del DN 14 {7D.1,1-91} Mahapadana Sutta – Gran discurso sobre el linaje
[2.1.] {43} «Después de esto, monjes, han pasado muchos años, varios cientos de miles de años han pasado, cuando el príncipe Vipassi dijo a su auriga: ‘enjaeza algunos carruajes finos, auriga. Vamos a salir a inspeccionar el Parque de los Placeres’. Y cuando el auriga lo hizo así, lo reportó al príncipe: ‘Su alteza, los finos carruajes están enjaezados; es tiempo de hacerlo cuando Usted así lo disponga’. Entonces, el príncipe Vipassi montó el carruaje y salió en procesión hacia el Parque de los Placeres.
[2.2.] {44} «Y mientras el príncipe Vipassi estaba conduciendo, monjes, hacia el Parque de los Placeres, vio a un hombre anciano encorvado como una viga deformada que soporta el techo, quebrado, apoyado en un bastón, tambaleante, enfermo, con su juventud esfumada. Y mientras lo miraba, preguntó a su auriga: ‘Auriga, ¿qué le ha pasado a este hombre? Su cabello no se parece al de los demás hombres y su cuerpo no es como el de los otros.’
«‘Príncipe, él es al que se le llama un «hombre anciano»’. – ‘Pero, ¿por qué se le llama así?’ – ‘A él se le llama anciano, príncipe, porque no le queda mucho por vivir’. – ‘Pero, ¿acaso yo también estoy sujeto a llegar a ser un hombre anciano y no soy exento de la vejez?’ – ‘Ambos, tú y yo, príncipe, estamos sujetos a ser hombres ancianos y no somos exentos de la vejez.’
«‘Entonces, bien, auriga, esto será todo por hoy en el Parque de los Placeres. Llévame ahora al palacio’. – ‘Muy bien, príncipe’, respondió el auriga y llevó al príncipe Vipassa de vuelta al palacio. Una vez llegado ahí, el príncipe Vipassa fue sobrecogido por el dolor y abatimiento, y lloró así: ‘la culpa es del nacimiento, siendo que en aquel que ha nacido, tiene que manifestarse la vejez por sí misma’.
[2.3.] {45} «Entonces, el rey Bandhuma mandó por el auriga y le dijo: ‘Bien, ¿no se divirtió hoy el príncipe en el Parque de los Placeres? ¿No era feliz ahí?’ – ‘Su majestad, el príncipe no se ha divertido hoy en el Parque de los Placeres ni tampoco era feliz ahí.’ – ‘Entonces, ¿qué es lo que ha visto por el camino?’ Y el auriga le relató al rey todo lo sucedido.