Del blog «Bhikkhu Sujato responde«, por Bhikkhu Sujato.
Upasika preguntó:
Según tengo entendido las bhikkhuni pueden ser obigadas/forzadas a confesar públicamente sus faltas, pero este criterio no aplica para los bhikkhu. ¿Es esto cierto? Si es así, ¿por qué no el bhikkhu no puede ser obligado? De no estar en lo cierto, ¿cómo funciona la confesión pública de las faltas en la comunidad monástica?
Respuesta del Bhikkhu Sujato:
Esto no es cierto. Más bien, parece ser una mala interpretación de uno de los ocho garudhammas, según el cual, el bhikkhu podría criticar a la bhikkhuni, pero la bhikkhuni no podría criticar al bhikkhu. Es un poco difícil imaginarse lo que esta regla significa exactamente en la práctica, siendo que tenemos muchos ejemplos, en la literatura budista, de las bhikkhunis criticando a los bhikkhus, sin que se indique que ellas hayan hecho algo incorrecto. Yo he reunido algunos de estos casos en mi ensayo titulado How a Nun may Scold a Monk (“Cómo la monja puede regañar al monje”). Parece que esto puede referirse a hacer acusaciones formales de que un bhikkhu haya trasgredido algún precepto del Vinaya.
Ayer hemos discutido sobre esta regla con algunas de las bhikkhunis superioras ordenadas en Taiwán que practican dentro de la tradición tibetana. Una de ellas contó la historia de un monje, a quien vio arrellanado en público y con sus hábitos deshechos. Entonces, le dijo que se arreglara, pero el monje se puso furioso con ella y, consecuentemente, la maltrató. Así que ella descubrió que esta regla puede servir para proteger a las bhikkhunis de las reacciones violentas de los bhikkhus.
En Vinaya no existe confesión pública. Quizá, te estás refiriendo a la confesión delante del Sangha. Esto se aplica en caso de determinadas ofensas, tales como sanghadisesa. En este caso, el bhikkhu ha de confesar su ofensa frente a todo el Sangha de los bhikkhus por el periodo de prueba. La bhikkhuni, tiene que confesar su ofensa en ambos Sanghas: la de los bhikkhus y de las bhikkhunis. Esta es otra área, en la cual el Vinaya es discriminatorio. Pero, semejantes cosas frecuentemente tienden a balancearse por sí solas, como cuando las otras diferencias favorecen a las bhikkhunis. Por ejemplo, la más común ofensa sanghadisesa para los bhikkhus, es tratada como la más suave ofensa pacittiya, en caso de las bhikkhunis. Además, las bhikkhunis no tienen que hacer un periodo adicional de la penitencia de parivasa, el cual puede extenderse por mucho tiempo.