El Buda explica cómo combinar la concentración a través de la atención consciente en la respiración (anapanasati samadhi) con los cuatro fundamentos de la atención consciente (satipatthana).
{986} Esto he escuchado. En una ocasión, el Bienaventurado estaba morando en Kimila en la Arboleda de Bambúes. Ahí, el Bienaventurado se dirigió al Venerable Kimila con estas palabras: “¿de qué manera, Kimila, la concentración a través de la atención consciente en la respiración cuando es cultivada y desarrollada, trae muchos frutos y beneficios?”
Cuando esto fue dicho, el Venerable Kimila permaneció en silencio. Entonces, la segunda vez el Bienaventurado se dirigió al Venerable Kimila con estas palabras: “¿de qué manera, Kimila, la concentración a través de la atención consciente en la respiración cuando es cultivada y desarrollada, trae muchos frutos y beneficios?”
Pero, cuando esto fue dicho, por segunda vez el Venerable Kimila permaneció en silencio. Entonces, la tercera vez el Bienaventurado se dirigió al Venerable Kimila con estas palabras: “¿de qué manera, Kimila, la concentración a través de la atención consciente en la respiración cuando es cultivada y desarrollada, trae muchos frutos y beneficios?” Pero, cuando esto fue dicho, por tercera vez el Venerable Kimila permaneció en silencio.
Entonces, el Venerable Ananda dijo al Bienaventurado: “Ahora es el tiempo para eso, oh Bienaventurado; ahora, es el tiempo para eso, oh Afortunado. El Bienaventurado debería hablarnos acerca de la concentración a través de la atención consciente en la respiración. Los monjes, habiéndolo escuchado del Bienaventurado, se acordarán de esto.”
“Pues bien, Ananda, escuchad y prestad atención que voy a hablar”.
“Sí, venerable señor”, respondió el Venerable Ananda y el Bienaventurado continuó: “¿Y cómo, Ananda, la concentración a través de la atención consciente en la respiración cuando es desarrollada y cultivada trae muchos frutos y beneficios? He aquí, Ananda, el monje, habiendo ido al bosque, al pie de un árbol o a una choza vacía, se sienta. Habiendo cruzando las piernas, con el cuerpo erecto, pone su atención consciente enfrente, y siempre consciente, inhala y siempre consciente, exhala.
Atención consciente en la respiración
“[i] Inhalando largo, él entiende: ‘Estoy inhalando largo’ o exhalando largo, entiende ‘Estoy exhalando largo’. [ii] Cuando inhala corto, él entiende ‘Estoy inhalando corto’ o cuando exhala corto, entiende ‘Estoy exhalando corto’. [iii] Y él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentado el cuerpo entero’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar experimentado el cuerpo entero’. [iv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar calmando las formaciones corporales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, calmando las formaciones corporales’.
“[v] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando la alegría’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando la alegría’. [vi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando el placer’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando el placer’. [vii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando las formaciones mentales’. [viii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar calmando las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, calmando las formaciones mentales’.
“[ix] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar experimentando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando la mente’. [x] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar llenando de gozo la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, llenando de gozo la mente’. [xi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar concentrando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, concentrando la mente’. [xii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar liberando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, liberando la mente’.
“[xiii] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando la impermanencia’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando la impermanencia’. [xiv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando el desvanecimiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el desvanecimiento’. [xv] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando el cese’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el cese’. [xvi] Él se entrena así: ‘Voy a inhalar contemplando el renunciamiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el renunciamiento’.
Contemplación del cuerpo
“Ananda, en cualquier ocasión, cuando el monje inhala largo, entiende: ‘Estoy inhalando largo’ o, cuando exhala largo, entiende: ‘Estoy exhalando largo’; cuando inhala corto, entiende: ‘Estoy inhalando corto’ y cuando exhala corto, entiende: ‘Estoy exhalando corto’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar experimentado el cuerpo entero’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentado el cuerpo entero’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar tranquilizando las formaciones corporales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, tranquilizando las formaciones corporales’ –en esta ocasión, el monje permanece contemplando el cuerpo en el cuerpo, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo. Yo digo, monjes, que la inhalación y la exhalación son una especie de cuerpo entre los cuerpos. Por esta razón, el monje, en esta ocasión, permanece contemplando el cuerpo en el cuerpo, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo.
Contemplación de las sensaciones
“Ananda, en cualquier ocasión el monje se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar experimentando la alegría’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando la alegría’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar experimentando el placer’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando el placer’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar experimentando las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando las formaciones mentales’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar tranquilizando las formaciones mentales’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, tranquilizando las formaciones mentales’ –en esta ocasión, el monje permanece contemplando las sensaciones en las sensaciones, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo. Yo digo, monjes, que la inhalación y la exhalación es una especie de sensación entre las sensaciones. Por esta razón, el monje, en esta ocasión, permanece contemplando las sensaciones en las sensaciones, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo.
Contemplación de la mente
“Ananda, en cada ocasión el monje se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar experimentando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, experimentando la mente’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar llenando de gozo la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, llenando de gozo la mente’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar concentrando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, concentrando la mente’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar liberando la mente’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, liberando la mente’ –en esta ocasión, el monje permanece contemplando la mente en la mente, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo. Yo no digo, monjes, que el desarrollo de la atención consciente en la respiración es para alguien que es olvidadizo, ni para alguien que no está plenamente atento. Por esta razón, el monje, en esta ocasión, permanece contemplando la mente en la mente, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo.
Contemplación de los fenómenos
“Ananda, en cualquier ocasión el monje se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar contemplando la impermanencia’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando la impermanencia’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar contemplando el desvanecimiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el desvanecimiento’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar contemplando el cese’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el cese’. Él se entrena de esta manera: ‘Voy a inhalar contemplando el renunciamiento’ y se entrena así: ‘Voy a exhalar, contemplando el renunciamiento’ –en esta ocasión, el monje permanece contemplando los fenómenos en los fenómenos, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo. Habiendo visto con sabiduría el abandono de la codicia y del pesar, él observa de cerca con ecuanimidad. Por esta razón, el monje, en esta ocasión, permanece contemplando los fenómenos en los fenómenos, fervorosamente, plenamente atento y consciente, habiendo dejado atrás la codicia y el pesar por el mundo.
“Imagina, Ananda, que en el medio del cruce de caminos hay un gran montículo de tierra, de modo que si un carro o un carruaje llegara ahí del este, oeste, norte o sur, podría allanar este gran montículo de tierra. De la misma manera, Ananda, cuando el monje mora contemplando el cuerpo en el cuerpo, las sensaciones en las sensaciones, la mente en la mente y los fenómenos en los fenómenos, allana a los malos e insalubres estados”.
FUENTES:
Bhikkhu Bodhi (2000) “Kimila” en The Connected Discourses of the Buda: A Translation of the Samyutta Nikaya. Boston, Wisdom Publications. Págs. 1775-1777.
“Kimilasutta” en World Tipitaka Edition, http://studies.worldtipitaka.org/tipitaka/14S5/10/10.1/10.1.10 13 de mayo de 2008
Traducido y editado por Anton P. Baron
Publicación de Bosque Theravada, 2010.